Tú y tu polola van al cine. En los primeros minutos, casi te atragantas con tus palomitas, por escuchar tu frase de propaganda : una serie de palabras pegadizas pronunciadas por un personaje muy conocido (como Alexis Sánchez en uno de sus comerciales). Esa es tu frase! Incluso habías considerado imprimirlo en algunas poleras. ¿Fue robado? Bueno, tal vez, pero tal vez no. Este artículo te dará algunos consejos para asegurarse de que tu frase de propaganda se mantenga en tu poder.


Una frase de propaganda, es una expresión generalmente popularizada por el uso repetido de una persona real o un personaje de ficción. Hoy, las frases de propaganda se consideran cada vez más como un componente importante del marketing y la promoción de un producto o servicio. Si reconoces algunas de estas frases de propaganda conocidas:


“Hasta la vista baby.” – El terminador

“¡Muéstrame el dinero!” – Tom Cruise en “Jerry Maguire”

“Soluciones legales Online” – AbogaDOC

¿Qué es una frase de propaganda?

Una frase de propaganda es esencialmente una marca registrada. Una marca comercial es cualquier palabra, nombre, eslogan, diseño o símbolo utilizado en el comercio para identificar un producto en particular y distinguirlo de los demás.

Al igual que los derechos de autor, las marcas registradas están protegidas como una forma de propiedad. A los propietarios de marcas comerciales registradas se les otorgan derechos exclusivos para su uso en el comercio. El objetivo principal de la protección de marcas comerciales es aumentar la confiabilidad de la identificación del mercado y, por lo tanto, ayudar a los consumidores a seleccionar bienes y servicios. Una marca registrada distintiva identifica rápidamente un producto, y con el tiempo la marca se puede equiparar con un nivel particular de calidad.

Al igual que con los derechos de autor, los derechos legales sobre las marcas comerciales surgen automáticamente sin trámites gubernamentales. Pero a diferencia de los derechos de autor, los derechos de marca no comienzan en el momento en que una palabra, símbolo o frase de propaganda se garabatea primero en papel. Por el contrario, los derechos de marca surgen del uso real de una marca distintiva en el comercio y registro de esta.

Si desarrolla una frase de propaganda en Chile, debe registrarla en el Instituto Nacional de Propiedad Industrial.

¿Qué beneficios tengo al registrar mi frase de propaganda?

Quizás te preguntes por qué es importante, las ventajas del registro de marcas comerciales son varias. Primero, el registro significa que la marca es legalmente válida. Esto lo protege en caso de una demanda por infracción o uso indebido por un tercero. Si tienes registrada tu marca, la carga de la prueba (quien tiene la responsabilidad de probar) se traslada al tercero, para demostrar por qué la marca que tienes registrada no merece la protección (demanda de nulidad o civil). En segundo lugar, el registro es un aviso a nivel nacional de propiedad del registrante (o sea, usted). Eso significa que otra persona que use o quiera usar la marca en otra parte del país no puede reclamar los derechos de propiedad territorial. En tercer lugar, al tener una marca registrada tienes el derecho de presentar demandas por infracción en los tribunales civiles, y exigir indemnizaciones por uso indebido. En caso de que aún no esté convencido de los beneficios, el registro de marcas simplemente sirve para disuadir a otros, para que no usen su marca por miedo a una batalla legal.

INAPI no va tan lejos, en caso de infracciones. Es el dueño de la marca que todavía tiene la carga o responsabilidad de proteger la marca registrada o frase de propaganda. El método principal para proteger una frase de propaganda es presentar una demanda civil (de Propiedad Industrial) por infracción o uso indebido. El demandante (usted) puede demandar por daños financieros, y/o una orden judicial contra el uso posterior. La prueba básica en demandas por infracción es si la frase de propaganda presuntamente infractora es lo suficientemente similar como para crear una “probabilidad de confusión”.

En resumen, aquí le mostramos cómo obtener la máxima protección y rendimiento posible de su frase de propaganda: desarrolle una marca o frase distintiva, úsela en el comercio y regístrela en el Instituto Nacional de Propiedad Industrial. Seguir estos tres pasos garantizará que cuando escuche la frase de propaganda en alguna película o comercial, sea usted el que diga “Muéstreme el dinero” en lugar de Tom Cruise.